Author: Motorizer
•domingo, mayo 31, 2009

IMG_6516

Tarde de domingo, ya empieza a apretar el calor, y decidimos irnos a repetir la ruta que hace dos años nos marcamos, buscando el Poblado del Oeste en ruinas del Coyote.

El punto de partida, el mismo pueblo de Tabernas, del que salimos, Dani el Marqués, Juan Miguel y un servidor, a eso de las seis de la tarde, arropados con gritos ánimo y júbilo por parte del público femenino que se nos cruza a nuestro paso (en otras palabras, nos llamaron, “tíos buenos”).

Tras empezar con un falso llano para entrar en calor, pronto tomamos la chicha del asunto, bajando frenéticamente hasta la rambla que no soltaremos hasta dentro de unos kilómetros.

El trazado del itinerario, lo lleva Dani en su móvil, que lleva integrado gps, y un maravilloso programa adecuado para ello (hasta con sonido de sirenas al puro estilo Tour de Francia). En una bifurcación, nos dice que tenemos que tirar por un camino que sube inexorablemente, y que no me suena de haberlo hecho la anterior vez. Pero pone poblado Western Leone, así que no acabaríamos en un pozo oscuro. La subida se las trae, y yo la subo muy chulito, ahí, de pie, como Marino Lejarreta. Consecuencia: lengua por los tobillos y más seca que una contestación de Chuck Norris ante una petición de limosna para el Domund. Dani nos trae dos noticias: una buena y otra mala. La buena, que sí, que el gps marcaba que ese era el camino, y que podíamos ver el poblado. La mala, que había que volver por donde habíamos subido y seguir por la rambla. Pues nada, para abajo.

IMG_6482

Se nota que este año ha llovido más y todo está más verde, incluso, tenemos que salvar algunos tramos con agua circulando por medio. Señores, ¡esto es BTT extremo!

IMG_6486

En medio del barrizal, encontramos a un compadre que se ha quedado con la C15 calada, y lleva empujándola él solo varios metros. Como buenos samaritanos riders (y del metal) prestamos nuestras hercúleas fuerzas para conseguir volver a arrancar el vehículo. Ya tenemos la buena acción del día.

Proseguimos, y en un despiste, seguimos rambla abajo, ya casi llegando al puente de la carretera, pero el Marqués y su gps nos muestran el camino, con un haz de luz poderoso bajando del cielo. Hay que retroceder de nuevo unos cien metros y meternos en otra rambla que se unía a la principal. Hay muchos conejos que se asustan a nuestro paso, yo creo que como no he visto en mi vida.

IMG_6490

Las paredes de la rambla son impresionantes, y paramos como en la anterior vez en un recodo, donde nos inmortalizamos.

IMG_6492

No, no parece que vaya a tirar ninguna falta Roberto Carlos.

Ya falta poco para llegar a nuestra meta, pero Juan Miguel toma las de Villadiego y se pasa la subida hasta el poblado, y a pesar de mis berridos, no consigo que se dé cuenta que hay que retroceder. Al final, regresa y cogemos las bicis al hombro para subir hasta el carril.

Ya casi hemos llegado. Lo que queda del decorado es más bien poco. El tiempo, y supongo que los vándalos se están encargando de deteriorarlo cada vez más. Entramos, pero ya no nos atrevemos a andar por ciertos sitios. Este lugar te pone la piel de gallina, pues las puertas chirrían, y te imaginas una escena de Abierto hasta el Amanecer si nos llega a pillar la noche allí.

IMG_6502

Nos hacemos las fotos de rigor y decidimos regresar, que el tiempo ahora corre en nuestra contra.

IMG_6514

Nos quedaba un obstáculo a salvar, una pista que sube salvajemente y que en la anterior ocasión la hice haciendo empujing. Pero no, le hemos echado lo que había que echarle, y llegamos como campeones a la verja, que tenemos que saltar (sin hacer comparaciones con otro odioso salto de la idem, que no voy a mencionar) y recogemos nuestro merecido premio: una bajada vertiginosa que nos hace poner las bicis a casi 70 kilómetros por hora, increíble.

Después del justo regalo, ya toca tomar la carretera hasta los coches, en el pueblo de Tabernas, cosa que se nos hace muy larga y tediosa, y un poco destrozapiernas, ya que hay muchas subidas largas y bajadas escasas. Pero cuando por fin vemos el destino, la meta, nos ponemos contentos como caracolillos en un día de lluvia. Lo hemos conseguido, hemos echado un buen rato de pedaleo por un sitio alucinante, solitario y a veces hasta fantasmagórico.

Los tesoros que tiene Almería.

Author: Motorizer
•sábado, mayo 30, 2009

blogcxmCarreraLaSagra

Un año más, se dan cita en la Puebla de Don Fadrique (Granada) los corredores de montaña para subir a tan emblemática cima. Una prueba durísima que este año ha aumentado el recorrido en unos cuantos kilómetros más. Son 27.5 Km. de recorrido, 2.100 metros de desnivel positivo y 1.750 metros. negativo. Con estos datos, se convierte en la edición más dura hasta el momento.

Y nuestra Mariquilla estará allí, a pesar de lesiones de rodilla.

Mucha suerte.

Aquí están los datos

diapo0b

perfil

Distancia: 27,5 km. - Desnivel + : 2.100 mts. - Dificultad: Alta - Coeficiente: 58

Control

Altura

Kilómetro

Situación

Avituallamiento

 

Hora

Salida

1.175 m.

0

Ayto. Puebla

 

 

9:00

1

1.805 m

6,400

Cumbre Calar

Líquido

 

 

2

1.280 m.

10,500

Cortijo Jorquera

Liq.-Sólido

Meta Juveniles

 

3

1.270 m.

15,350

Ermita Santas

Líquido

Cierre control

11:45

4

1.650 m.

19,000

Final pista

Liq.-Sólido

 

 

5

2.000 m.

20,400

Morra Zamarrillas

Liq.-Sólido(barritas)

Cierre control

13:00

6

2.383 m.

22,000

Cumbre Sagra

Líquido

 

 

7

2.000 m

23,600

Morra Zamarrillas

Liq.-Sólido(barritas)

 

 

Meta

1.500 m

27,500

Collados

Liq.-Sólido

Cierre Meta

14:30

Fuente: Amigos de la Sagra

Author: Fox Mulder
•domingo, mayo 17, 2009
Bueno, sí que ha pasado tiempo desde que escribiera aquí por última vez. Una pena, porque la ruta de hoy es de las que hacen afición. Y encima la climatología estuvo de nuestra parte... en exceso quizás, porque más de uno que pasa de pringarse con protectores solares y mariconadas de esas ha vuelto como una gamba a la parrilla.

Salimos de Canal Sur a las 8 Olga, Antonio, Luigui, y yo, rumbo a la Sierra de Baza. Pero antes parada técnica en el Montellano, donde el jefe nos tiene preparado otro show marca de la casa, empezó hablando de piononos, y ya había perdido el hilo del monólogo cuando escuché algo de "guarra", y "se traga las pollas dobladas". Hay que decir que cada vez encuentro su estilo más depurado, e incluso esta mañana se permitió el lujo de hacer publicidad de su pata de cordero. Un maestro, vamos.

Bueno, el plan era localizar el Pino de la Señora, oculto en algún recóndito lugar del Barranco de la Fonfría en la Sierra de Baza, pero allí mismo, Antonio, mientras digería su pionono, nos plantea una ruta alternativa por la zona sur de la Sierra de Baza, el objetivo: un bosque de álamos centenarios.
Yo, que para estas cosas soy muy matemático, pienso para mi mismo y mis adentros: "¡Cómo está Megan Fox!", pero también pienso: "¿Será posible que Olga me haya perdido mi chambergo?", pero entonces aprieto los ojos, que se me ponen como a Jackie Chan, hago un esfuerzo supremo por concentrarme, y pienso: "ya he ido a buscar el Pino de la Señora dos veces, y las dos veces me volví sin encontrarlo; y ahora hablamos de un bosque entero... (bosque > árbol) => más fácil encontrar bosque. Sí, seguro...". Así que tras una breve indecisión, la ruta alternativa triunfa.

A la altura de Fiñana cogemos el desvío a Escúllar y entramos en la Sierra de Baza por la puerta de atrás, que es la nuestra, como para todo en Andalucía. Y con los mapas y el GEPE-EZE no nos resulta difícil encontrar el inicio de la ruta, que para nuestra tranquilidad se encuentra perfectamente señalizada.
Esta era la primera ruta que coincidía con Antonio, dícese del hombre con una Wikipedia en la cabeza, Antoniopedia, o Wiki-Antonio. Y no habíamos andado mucho, de hecho fue durante una parada en el camino, cuando me di cuenta que esta ruta iba a ser diferente: no sólo nos ibamos a divertir, sino que además ibamos a aprender un montón de cosas. Que Antonio me perdone que ya mi cabeza no rige como antaño, y no me llevé para tomar apuntes, así que un montón de cosas que dijo no las podré reflejar con exactitud en esta crónica... por no decir, que es que ni las podré reflejar.

Como os digo, esa pequeña parada que hicimos con objeto de inmortalizar imágenes de nuestra Sierra Nevada, se convirtió en una clase magistral de botánica. Y donde antes hubiera visto simplemente verde que es mejor no pisar para que no se enfade Luigui ;-) ahora veía innumerables variedades de flores y hierbas, algunas incluso de excelente sabor para infusión. Esto es algo como cuando Neo comprende Matrix, pero en ecológico... pero qué gilipolleces digo.

Bueno, estamos ya dispuestos, comenzamos a andar, me hecho la mochila a la espalda y las dos contracturas aguantan el envite. El sendero es muy bueno, y nos planteamos repetir en bici, y discurre en todo momento entre frondosa vegetación, rumor de agua, y canto de pájaros e insectos. Son escenas absolutamente bucólicas. Las cámaras empiezan a echar humo.

Grandes ejemplares de árboles flanquean el camino a nuestro paso, aportando sombra y color, y de vez en cuando, centenarias construcciones semi-derruidas se asoman a un claro en el camino. Además de vegetación nos topamos con algunos batracios que salen espantados al vernos, sólo un pequeño renacuajo se deja fotografiar.

Algunos árboles son de proporciones tan espectaculares que hasta Antonio queda sorprendido, como ese cerezo al que le hemos tomado la matrícula para volver a recoger su fruto dentro de un mes, si es que los arrendajos nos lo permiten. También nos llama la atención un pino que se eleva por encima de los 20 metros, y un castaño al margen del sendero, fuerte y antiguo.

Encontramos un cartel informativo destrozado por un cartuchazo, y no quiero perder la oportunidad de destacar desde aquí la buena puntería del individuo responsable, así como, por otro lado, su limitada inteligencia. Un claro ejemplo del dicho "tienes más peligro que un mono con dos pistolas", pero en versión escopeta de cartuchos.

Llegamos al final del sendero "oficial" y emprendemos camino de vuelta por la pista forestal que cruza en aquel mismo lugar. El firme está en buen estado, y pienso en que gustazo sería hacer esa pista en bici, pero la pendiente es inexorable y no da tregua apenas en todo el recorrido de vuelta.
Paramos a comer junto a unos riscos, bajo unos pinos que nos hacen sombra porque a esas alturas el Sol estaba pegando de lo lindo. Olga se marca el detallazo de traerse una botella de Ribera de Duero del que damos buena cuenta (aunque seguimos echando de menos la bota de Angel, pero entre tanto...), y el menú gourmet no queda ahí, en el postre: granadilla, y tamarillo. Esto, junto con la hierba que identificó Antonio para ensalada, tan apreciada en Murcia y que ahora no recuerdo su nombre.

Después de la comida, foto de bandera, y vuelta al camino. Al poco tiempo llegamos al Mirador Barea, un mirador muy bien hecho y con unas vistas impresionantes de las sierras circundantes. Aún quedaban dos kilómetros de pista para llegar a la carretera principal, durante el trayecto vimos un par de venados moverse ágiles entre la vegetación, apenas una sombra. Y en una zona de umbría en el margen del camino, Antonio descubrió varias orquídeas.

Por último, y tras un pequeño recorrido por asfalto, cerramos el círculo y llegamos a los coches. Allí nos esperaba un enjambre de bichejos con querencia por el blanco, precisamente el color de las bermudas de Olga. Así que aligeramos el ritmo y nos metimos en el coche rápidamente, aunque también lo hicieron unos cuantos bichejos, que ibamos tirando por la ventana cada vez que nos hacíamos con uno de ellos. Alguno, seguro, llegaría hasta Almería.
Author: Motorizer
•lunes, mayo 11, 2009
IMG_6187

Un fin de semana más volvimos a las andadas. Todavía tenemos ganas de nieve y aún queda mucha en la sierra, en un año que esperemos que sea la tónica durante un periodo largo. Teníamos planeado el conocer el Circo del Alhorí, sus cascadas, su corredor, y el objetivo marcado esta vez era incluso subir al Picón de Jérez, otro tresmil de Sierra Nevada. El tiempo y las condiciones no acompañaron, pero a cambio, tuvimos una jornada con una ruta muy gustosa, mezcla primaveral e invernal, donde la nieve va dejando paso al verdor de la jovial estación.

Para esta ocasión, nos juntamos unos cuantos ya organizados y convocados previamente, así: María del Mar, Ana, Olga, Antonio y un servidor; y otros, agregados espontáneamente, pues en el maletero de mi coche había dos polizones, a los cuales les obligamos a pagar su viaje con la condena de acompañarnos: Caiollu y un bebé al cual, su chupete siempre amenazaba con taladrarle el esófago. Su material “técnico” fue amablemente transportado por Ana y María del Mar.

IMG_6191

Salimos como siempre de Canal Sur, y al recibir un mensaje de Olga diciendo que se iban directamente, quedamos en reunirnos en mitad del camino, y así desayunar. Como en muchas ocasiones, el lugar era Gérgal, donde nos avituallamos bien de tostadas y bebida caliente. Y de allí, a Jérez del Marquesado. El día estaba nublado, pero confiábamos que sólo se quedara en eso. En seguida tomamos la pista forestal camino del refugio, y aunque era transitable, la subida por el cortafuegos me hizo dudar de dejar el coche allí o más arriba. Decían que habían arreglado el acceso, pero pronto pudimos comprobar que si eso había sido así, el crudo y duro invierno se había encargado de deshacerlo. Pronto nos encontramos con grandes grietas y cráteres en mitad del camino, teniendo que maniobrar con mucha precaución, hasta llegar a un anchurón donde decidimos dejar los coches. Total, nos quedaban apenas un kilómetro y medio hasta el refugio de Postero Alto.

Postero_Pano_001Pues nada, era el momento de prepararse, y como siempre, con una subida para entrar en calor y animarnos a seguir. No tardamos en llegar al Postero, que ya tenía su parking bastante lleno. Seguimos andando y tomamos la dirección del río, por una senda amplia y cómoda, entre pinos, con un verdor primaveral espectacular.IMG_6127

El agua era el auténtico protagonista, ya fuera en forma de nieve, de cascadas, de ríos, y nosotros, privilegiados testigos de como la vida surge tan explosiva después de un frío invierno.

IMG_6128

El refugio se iba empequeñeciendo conforme íbamos ascendiendo y ya nos quedaba ir hacia delante, en busca del barranco por donde discurría el Alhorí, salvaje, con fuerza y dando vida a su alrededor. Ana iba como una campeona, después de haber temido que su larga pausa montañera le iba a pasar factura, pero es que, una vez tomado el ritmo, no había quien nos parara. De todas formas, ya íbamos preocupados por lo que se nos podía avecinar, ya que las nubes estaban algo “belicosas”.

De pronto, al acabar la senda, se nos presentó el barranco propiamente dicho, ya estábamos para meternos en el berenjenal, y mirar hacia arriba daba impresión, miedo, pavor, acongojamiento. Glups, mi nuez tragaba saliva compulsivamente, pensando en que no iba a ser muy fácil llegar hasta el circo, pues se veía gran cantidad de nieve, y con el deshielo podría ser muy peligroso.

IMG_6131

Tras unos prados de un verde intenso, bajamos hacia el arroyo, el cual brotaba de unos túneles de nieve impresionantes. A lo lejos divisamos a cinco personas en un nevero, que más tarde pudimos comprobar que estaban practicando autodetención sin ayuda de piolet.

Y fue al pasar cerca de ellos, cuando sucedió la tragedia. Yo me quedé más rezagado haciendo fotos, mientras el resto cruzaba el arroyo por los borreguiles; me quedé en el otro margen, y comencé a ascender, buscando por donde cruzar, sin darme cuenta que estaba caminando por encima del río. Olga y Antonio comenzaron a gritarme, y luego Ana y María del Mar, pues ellos veían que estaba andando por encima de una fina capa de nieve, de un frágil puente que estaba a punto de desmoronarse bajo mi peso. Y pasó lo que tenía que pasar. En un breve resumen, intentaré mostrar lo que ocurrió en esos nanosegundos que transcurrieron desde la voz de alarma hasta la hecatombe: mi mente pensaba en qué fotografiar, en exposición más o menos larga para lograr algún “sperm river”, en que cruzar estaba cada vez más chungo, y por el rabillo del ojo vi a los demás haciéndome aspavientos para llamar mi atención; primero pensé que me estaban saludando, incauto de mí, pero pronto comprendí que eran llamadas de atención, de peligro, de danger, achtung, de quítate de ahí, insensato, sal echando leches, Dios mío que se la pega; Era demasiado tarde: el suelo se abrió bajo mis pies, fagocitado inexorablemente hacia un destino incierto, era una escena dantesca, en la que me vi devorado por Sarlacc, la criatura del Mar de Dunas de Tatooine, pero en versión nevadensis. Mi vida volvió a pasar rápidamente por mis ojos, mientras buscaba mi espada láser con la que deshacerme de los tentáculos de la muerte. Por suerte, me hundí y di pie sin más contratiempo que mojarme las botas, y quedarme aprisionado por la nieve que se había desmoronado. Conseguí salir y buscar cruzar el río ya de una manera menos arriesgada. Lamentablemente, esa no fue mi única caída durante el día.

IMG_6148

IMG_6158 IMG_6162

La nieve ocupaba el barranco en su totalidad, y seguimos subiendo, con el mencionado barranco encajonándose cada vez más. Pero las opciones de subir, viendo lo inconsistente de la nieve no hacía muy aconsejable seguir, con miedo a hundirnos, y con el añadido de la lluvia que había empezado a caer acompañada de viento. Antonio inspeccionó el terreno, pero consideró que había mucho riesgo, sobre todo porque no todo el mundo del grupo tenía crampones. Así que decidimos buscar otra alternativa.

DSCN4536

Tomamos una senda o trocha en dirección oeste, buscando lugares más despejados de nieve y que pudiéramos refugiarnos del viento. Este itinerario fue una verdadera oportunidad para que Antonio nos ilustrara con su sapiencia botánica, descubriéndonos plantas que para muchos pasarían desapercibidos, como el té de la sierra, uno de los tesoros de este macizo, violetas de Sierra Nevada, mejorana o sabinas y enebros rastreros, enseñándonos multitud de utilidades culinarias de estas plantas.

Llegaba la hora de comer, y nuestros estómagos así lo exigían, por lo que buscamos un lugar donde protegernos del viento, y con buenas vistas. Una privilegiada atalaya dominaba dos valles, y se estaba a cubierto del viento. La lluvia nos había dado un respiro y había que aprovechar. Pronto sacamos las viandas y comenzamos a jalar. En esta ocasión el detalle delicatessen fue una quesada pasiega que fue bien recibida por todos, y es que en el campo todo saber mejor, y si son estos caprichos, mucho más.

IMG_6180

Tras hacer el ganso un rato, fotos de rigor y reposar la comida, rápidamente comenzamos a bajar campo a través, pues nuestra intención era coger el sendero sulayr y de ahí volver al Postero alto. La roca estaba húmeda y más de uno nos dejamos acariciar por algún piorno en nuestras posaderas. Una vez llegados al sendero, parcialmente cubierto por plantas, fue fácil llegar hasta el río, que cruzamos sin mayor problema. El camino de regreso se hizo sin mayor contratiempo.

Era buena hora, así que pensamos en bajar a Alquife y ver las minas, el hoyo de más de 100 metros de profundidad que horadaron las compañías mineras. Pero antes, nos tomamos un refrigerio en el refugio de Postero Alto, refugio de Alta montaña, pero con fácil acceso para todo aquel que tenga un buen todo terreno y quiera comer un día en la sierra, con lo cual, es también un improvisado restaurante de montaña. Tacones, botox y silicona se mezclan contrastadamente con las embarradas botas y las sudorosas chaquetas y cremas solares de los sufridos montañeros.

IMG_6218Tras coger los coches, y conducir como si estuvieras operando a corazón abierto, hasta alcanzar la pista, nos encaminamos hacia Alquife, tal y como habíamos programado, haciendo antes una parada en la carretera, para poder beber de una fuente, dentro de la umbría del bosque de un río, cuyas aguas tienen un sabor que no tiene nada que envidiar a las más reputadas y reconocidas marcas que se comercian. Llenamos unas botellas, hicimos unas fotos a un castaño gigante al otro lado del camino y seguimos hacia delante.

Cuando dejamos el coche ante el recinto minero, un “amigo” del este nos inquirió que no se podía pasar, que era propiedad privada, a lo cual, Antonio respondió con una contundente diplomacia, argumentando que veníamos en son de paz, no portábamos armas y que sólo íbamos a ver el hoyo. Fueron momentos tensos, en los que esperamos que en cualquier momento el individuo sacara su kalashnikov lleno de muescas e hiciera un barrido sobre nuestras cabezas. Por fortuna eso no sucedió, y nos permitió el paso.

Postero_Pano_008

La visita al reino de la escoria, la ruina y el polvo rojo fue muy didáctica, imaginando desde cómo sería la vida allí, a que era el escenario perfecto para una película donde los protagonistas van muriendo poco a poco a manos de un asesino en serie. Era la hora de despedirse, puesto que Antonio y Olga se quedaban en Lanteira. La lluvia nos acompañó hasta Almería.

Ahora tocaba descansar.

Author: Motorizer
•sábado, mayo 02, 2009

Nuestra amiga Mariquilla nos cuenta en primera persona su experiencia en esta dura prueba, sus reflexiones más íntimas y sus sentimientos más profundos cuando se encuentra inmersa en una carrera.

“¡HOLA A TODOS!

Bueno, os habría escrito una crónica sobre mi carrera, pero siento deciros que yo no sé escribir, no se me da bien eso de redactar, lo siento… eso sí, que si queréis quedar conmigo y ver mi carilla de flipada aquí estoy disponible... jejejeje.. son increíbles la de sensaciones  que recorren mi cuerpecico y mi mente cada vez que recuerdo alguna de mis carreras, eso que soy una plitrafilla...

¿Qué os digo? Qué difícil es escribir cuando se tienen tantas cosas en la cabeza y una no sabe ni por cual empezar ni como hacerlo...

Cada carrera para mi es un viaje.... es "mi viaje", ¿sabéis? Os llevo a todos en mi viaje, viajareis a través de mí, veréis a través de mis ojos y pensareis con mi pensamiento..... vais conmigo en todo momento y comparto con vosotros mi experiencia...si acaso algún día sentís un escalofrío mientras que yo hago "mi viaje", no temáis, no es solos vuestro, el escalofrío, es compartido......

Uno de los pensamientos que llevo en mi cabeza mientras que voy a mi destino de salida es que nadie, ahí en ese mundo que dejo cada vez que voy a correr, sabe que estamos aquí arriba unos cientos de personas, con ilusiones, sueños y con distintos motivos que nos unen en un único espacio, ¡ésta es la montaña y sus gentes!

Es mi burbuja de vida, en medio del abismo.

Comienzo a correr, mi respiración empieza a entrecortarse, mis pulmones se van abriendo lentamente, mi pulso se acelera, los nervios se van retirando y vuelven a su casa (porque los hay y muchos), y empiezo a ser yo, en estado puro, voy corriendo y siento mi libertad y a pesar de mis dolores, de ver como me adelanta la gente y mil detalles más que a otros le harían decaer y flojear... yo me siento la chica mas feliz del universo en ese preciso momento. ¡estoy haciendo lo que me gusta!.... mi mente que nunca descansa.... retoma el monólogo que siempre tengo con mi yo mas profundo en este tipo de pruebas... y en mis entrenos... y empiezo a preguntarme varias cuestiones... ¿por qué tendremos los hombres ese afán por conquistar todos los medios? el aire, el agua, la tierra, el fuego. ¿por que esa lucha contra los limites naturales que recibimos? ¿por qué ese afán  por conocer y experimentar y vivir , lo que vive el cóndor, la ballena, el rebeco o el tigrillo?

Solo sé que aquí estoy otra vez, retando una vez más mis límites, buscando un horizonte más lejano, conociéndome más a mí misma y sumergiéndome en mi más profundo "yo", ese que en mis días de diario intento encontrar y no lo logro... pero es en mitad de éste, "mi viaje", cuando aterrizo.... ¿que pasó? alguien me habla, me cuenta parte de su vida en minutos (os juro que he tenido conversaciones increíbles en muchas carreras), o tengo un tropezón que me hace volver al momento y lugar, o llego a un avituallamiento y me repongo y por qué no decirlo.. me doy un buen culazo, jajajaja...

RunningMe gusta evadirme de mi vida y sentir como si estuviera en otro país, en otro hemisferio, en otro continente y a otra hora... Me gusta correr y tener la sensación de no saber muy bien qué hora es, cuántos kilómetros llevamos, no saber qué recorrido nos queda, si son subidas o bajadas... me gusta aventurarme a la ignorancia. Cuando flojeo o me vienen pensamientos negativos, que también los hay en muchos momentos en los que estas sufriendo, es ahí cuando me repito a mi misma ¡ESTOY CORRIENDO EN MONTAÑA!, lo repito constantemente para asumirlo, pienso lo que me he preparado para este "mi viaje", lo que he soñado con él, en todos los que de una manera muy incondicional estáis siempre a mi lado, en ese mensaje que mi amigo Fernando me envió, que precioso y que fuerza me dio mas grande, porque están los que creen en mi, aunque a veces yo no crea nada.... sentir que tengo que intentarlo... y me digo: ¡estoy aquí y yo puedo!

Miro el paisaje, todo precioso, tanta vida rodeándome que no podía dejarme vencer por mis miedos, mis dolores, mi vida... mis recuerdos que me hacían ponerme triste y plantearme por qué llegué yo a este tipo de pruebas y por medio de quien, te da tiempo de pensar en todo y de echar de menos a los que ya no están, tanto los vivos como los muertos, esos que no han querido acompañarme en éste, "mi viaje", y ni se han preocupado de saber cómo estoy y animarme... pero ¡siempre ganan los buenos! y siento cómo me llegan los ánimos de todos, noté vuestra energía positiva y vuestra fuerza, pienso en cada uno de vosotros en dónde estaréis en ese momento y que cada vez que pensáis en mí... me estáis diciendo.. ¡Ánimo María que puedes! y cada vez que pensaba en mi Mami me venía su típica frase... ¡no te caigas! hasta que me caí y ya me quedé tranquila, jajajaja... y a mi amigo Jesús , mi monitor, cuando en sus clases nos dice... dosificar que viene una subida... jaja... yo me decía... dosifica ¡que no sabes que nos queda aún! Mi gran María Izquierdo que sabe lo que es esto, sabe lo que es estar lesionada y somos almas gemelas de la montaña... es mi media mandarina, que ganas de volver a correr con ella... es todo corazón ¡me acordé de todo, todos, todos!

La mente es poderosa, ella es la que mueve mis piernas, mis brazos, mi ser, hace bombear a mi corazón y me hace ir con una sonrisa de gilipollas que no puedo evitar... porque veo que ¡es esto lo que me hace feliz! He de decir que mi hermano me lo dijo... que no le debo nada nadie y nadie me debe nada a mi... ¡ay! ¡Antonio cuanto te quiero!

En este tipo de pruebas tu único rival eres tú mismo... ¡corres contra ti! aunque lo mejor es llevarte bien y correr contigo... respetando tus límites, conociendo al máximo tu cuerpo y tu mente.

No me encontraba muy bien que digamos, es cierto, todos lo sabéis, llevo una racha algo difícil, son épocas de la vida, momentos... no he podido entrenar como otros años, por no cuidarme como es debido y cometer mucho errores en mi pasado, mi salud se ha resentido de por vida, y todos los días me acuesto y levanto con dolores, que precisamente no es una pedazo de mujer, jajaja, he tenido mis dudas de si debería haber entrenado las dichosas escaleras (que en mi vida lo he hecho) de que si no hago series (no me refiero a las de la televisión, jeje) que los abdominales solo los trabajo cuando me río, dudo de si este será mi deporte, de si mi cuerpo aguantara otro tirón  de éstos y de si mi mente esta a la altura de las circunstancias, he tenido problemas que psicológicamente no te hacen estar tranquila, y eso es necesario, la tranquilidad tan deseada y necesitada por todos, me dije que sería la ultima, que ya no iría a ninguna carrera más, pero, no se como deciros... que ya estoy inscrita a la carrera de La Sagra, jajaja, a ver como llego a esa, lo sé, mi madre me lo dice: sarna con gusto no pica, y es que es tan tremendamente inmenso el grado de satisfacción, felicidad, plenitud y me siento tan orgullosa de mi misma que ¡vuelvo! siempre vuelvo a inscribirme a otra carrera pero.. porque  aquí estoy bien!!!!!

Cuando llegué y dejé el coche en los aparcamientos, me dirigía a por el dorsal y me repetía a mí misma, ¡aquí estoy bien! ¡todo lo que quiero esta aquí! ¿Qué mas puedo querer?

Bueno, que veis que me enrollo y no paro, sé que para muchos esto no significa nada, sé que están los que ganan, se que están las maquinas  y las mas fuertes y etc etc etc... pero también sé que estoy yo, haciendo lo que me gusta. No es para tanto, lo que pasa que si me veis la cara y leéis este texto, parece que he hecho el carrerón del siglo... en mi mundo era uno de "mis viajes".. jajaja... y he querido compartirlo con vosotros....

Respecto al sitio, tenemos que ir a hacer alguna rutilla apañada por allí, el tiempo fue lo peor, sin para de llover, pero a mí me dio por cantar una canción, jajaja, la de Julio Iglesias.. esa de amo la vida, amo el amor ,soy un truhan soy un señor.... jajaja.... había un chico que se meaba de risa... también me dio por decirle a los de los avituallamientos que no paraban de escupirme, y como no... fui con mi Tote, mi gran compañero... a ver si entreno más y me pongo más fuerte y algún día  lo fundo por ahí... jajajaja... es broma... ya sabes que me gusta seguir tu culillo y gastar nuestras bromas...

¡Eso sí! Entré a meta corriendo, muy fresca y mojada (empapada), aplaudiendo a toda la gente que incondicionalmente estaban allí animándonos.... y ¡muy FELIZ! y es cuando me dije... joer, debería de haber sufrido algo, jajajaja.. y es que no me pongo al limite nunca... me da yuyu, que me de la temida pájara ¡prefiero..llegar! y me dije otra vez ¡coño! eres una campeona, de tu casa pero campeona, jajajaja.

Que os dediqué mi carrera a todos, y por supuesto , de mi familia siempre me acuerdo, ¡que yo soy muy de los míos!

GRACIAS POR ESTAR SIEMPRE AHI!!!!!