Author: Motorizer
•sábado, junio 06, 2009

IMG_6546

Hacía tiempo que no nos dejábamos caer por la Ragua, y en mi caso, eso es algo imperdonable. El Chullo no lo habíamos catado aún esta temporada, y en vista que lo de Siete Lagunas se retrasaba, no podía quedarme en casa. Necesitaba salir aunque fuera a dar un garbeo.

Así que, de forma improvisada, nos hemos plantado el Broken Knee Team, o sea Jaime y un servidor, a medir nuestras fuerzas con la cima provincial. Salimos no excesivamente temprano (ocho y treinta), cogiendo la autovía hasta la Calahorra. Ya se puede ver que la nieve ha dicho adiós definitivamente, pero de recuerdo nos deja algunos neveros aislados que se resisten a irse, y eso que estamos en junio ya.

Adelantamos a unos sufridos ciclistas que estas horas de la mañana están a punto de coronar el Puerto de la Ragua. Nosotros llegamos, aparcamos, cogemos bártulos y tiramos millas para arriba.

En esta ocasión, coincidimos con una pareja que se dirige por el mismo camino, y al obligado saludo de buenos días, pronto entablamos conversación que no para hasta llegar al Chullo. Sin darnos cuenta, habíamos subido toda la loma sin apenas esfuerzo aparente. Y es que, cuando se empieza a hablar de montaña, de rutas, de cimas, de Anetos, Posets, Toubkales, y demás historias, el tiempo pasa volado.

IMG_6532

El viento hace aparición, y las nubes se van haciendo más y más grandes. Agustín y Conchi (que así se llamaban este simpático matrimonio) se despiden de nosotros, pues pretenden llegar al Almirez, pasando por la Laguna Seca, y volver, aunque la cosa no pinta muy bien por la zona, con esas cumbres cubiertas (ya atrajeron una granizada de escándalo en Lavaderos de la Reina la semana anterior, tal y como nos contaron).

Nosotros aprovechamos para hacer algunas fotos, pues en la conversación se me pasó el inmortalizar la subida, cosa rara en mí. Los piornos está floridos, de un amarillo intenso, con lo que el paisaje es espectacular.

Tras dar cuentas de algunas provisiones, tomamos el camino de regreso, donde ya si disparo más libremente la cámara, pero en realidad estamos más disfrutando de las vistas y de los olores que nos ha traído la primavera.

IMG_6557

Es difícil fotografiar a los grandes de Sierra Nevada, pues están tapadas por las nubes, y a nosotros no nos gusta cómo caza la perra, ya que puede liarse parda en pocos minutos. De hecho, el Chullo ya se ha cubierto de nubes. Así que seguimos bajando. Hay mucho movimiento de fauna, pues los insectos andan y vuelan a sus anchas.

IMG_6566

El amarillo es el color dominante, que contrasta con el verde de los pinos. Casi sin darnos cuenta, ya estamos afrontando el cortafuegos, donde otra pareja que sube en esos momentos, también nos pregunta por la Laguna Seca (¿será acaso el lugar de moda, y no nos hemos enterado?). Les respondo amablemente que suban al Chullo que aún les queda un poco, y luego en media hora larga se pueden poner en la citada Laguna. Seguimos nuestro camino, atentos a nuestras rodillas.

Ya estamos en el coche, pero antes de irnos decidimos tirar para la fuente de las Yeguas, donde refrescarnos como nos merecemos, hacernos alguna foto que otra y regresar por un bonito sendero entre los pinos, a tomar nota para el verano.

IMG_6590

No hay mucha gente en la Ragua, y el lugar está paradisíaco, todo verde, muy bucólico, y como aún nos queda jamón, queso y pan, nos nos vamos a ir sin aprovechar la coyuntura, así que nos sentamos en una mesa redonda, digna de Kamelot, y con mi particular Excalibur Manuela 3.0 reparto como buenos hermanos las viandas que portamos. Pero claro, sin agua, se nos hace bola en la boca, así que volvemos a la fuente de las Yeguas esta vez en coche, y con la premura de desatascar nuestros castigados esófagos. Mala suerte, nos toca esperar un larguísimo y eterno turno, tras la oportuna familia “llenagarrafasgigantescasparatodalasemana”. Cuando nos llega el ansiado momento, nuestra cara es de un color morado cardenal vaticano intenso. Llenamos la botella, y dejamos caer todo el contenido en la garganta, a modo de avenida torrencial de una tormenta de verano. Lo hemos conseguido, no nos hemos ahogado.

Es hora de volver, y con la satisfacción de que nuestras rodillas han respondido. Estoy seguro que regresaré alguna vez por la zona. Me ha gustado y repetiré el Chullo, eso estoy seguro (y vosotros también).

Sierra_Nevada_Pano_001

This entry was posted on sábado, junio 06, 2009 and is filed under , , . You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0 feed. You can leave a response, or trackback from your own site.